miércoles, 23 de diciembre de 2009

NAVIDAD

Todo el mundo corre como desesperado, en las carreteras no hay campo para un solo vehiculo más, el caos se apodera de la multitud, y yo perdido en un mar de gente no se ni por donde ir, unos me gritan "hey por aquí", otras casi que me toman del brazo para que les preste atención, y entre mas camino más me confundo, menos quiero seguir, tengo ganas de volver atras...

para muchos las lineas que he escrito arriba podrían bien ser la trama de una pelicula del fin del mundo, sin embargo solo estoy retratando lo que viví hoy en la mañana tratando de hacer las compras navideñas, que desesperación, que caos, que estrés, es increible lo comercial que se ha vuelto esta festividad, y mientras tanto, nosotros lo único que hacemos es participar de la histeria colectiva y seguir la corriente.

"Haz tu parte", es una frase que escuché una vez, y que en estas épocas resuena en mi cabeza mas que la musiquita navideña que viene con las luces del arbolito que adorna la sala de mi casa, HAZ TU PARTE, y se que debo manifestar mi fe, mostrarle al mundo que la navidad es mas que una cena en familia y darle regalos a toda la gente que me recuerde, aunque en el resto del año no les escriba, ni los llame, ni me importen. creo que debo mostrar la realidad de la vida, interesarme por los más necesitados, y buscar la forma de hacer el bien a los demás. Aclaro que me encanta el matiz de la cena y de juntarse con familia y amigos, sin embargo, todas estas fiestas son mas que eso.

Aunque no siempre es sencillo ser un hijo de Pastor, una de las grandes bendiciones de serlo es que siempre recibimos consejos sabios, recuerdo que de pequeño le hice una pregunta a mi papá "¿Que es la navidad?", y entre tantas cosas que me respondió, recuerdo que lo que más grabado se me quedó fue: la navidad es el nacimiento del Mesías, el Salvador prometido, el hijo de Dios. Y aunque me imagino que ya todos sabían esto, y que muchos lo dan por obvio, la pregunta que cabe es ¿Cuantos celebramos realmente la venida del Mesías?, estamos en navidad recordando a los mas necesitados, estamos buscando almas angustiadas para anunciarles las buenas nuevas, Me gusta pensar, que en esta época ya no son los ángeles quienes anuncian las noticias, sino que ese es nuestro trabajo.

Como Hp me ha tocado ver todo tipo de festividades navideñas, aburrirme en fiestas mediocres, escaparme para estar con la guila o con los compas, dormirme temprano en sinónimo de rebeldía, pero casi nunca he celebrado a como lo debo hacer. este año será diferente, mi consigna es luchar para que la gente vea la luz, que las personas vean que el salvador ha nacido en mi, y darme, en realidad darme por los que me necesitan, por los que necesitan a Dios, porque como me puedo sentar a la mesa en visperas de tan gloriosa fecha (aunque no nació el 25 de diciembre, pero igual así lo celebramos, sabiendo que no he hecho nada por los desposeídos. Cristo vino a este mundo sin nada, pués lo quería dar todo, yo me considero afortunado porque tengo muchisimo, y no me voy a quedar de brazos cruzados.

Ayer mientras observaba las noticias pasaron un reportaje sobre un tugurio que queda detrás de un gran mall, y le preguntaron a la gente que opinaban sobre eso, y uno de los entrevistados dijo "diay así es la vida, unos tienen y otros no", me hirvió la sangre y quise como patearlo, pero comprendí que esa es la realidad de un país donde cada uno piensa en si mismo y se ha olvidado del projimo. Haz tu parte, eso sigue resonando en mi cabeza y vos en que piensas? que celebras? a quien ayudas?

feliz naciemiento del redentor a todos los hp del mundo y al mundo entero.

2 comentarios:

Pablo Vargas dijo...

Man si, precisamente en esta noche estaba leyendo una reflexion de Max Lucado y me ocurrio escribir sobre eso, sobre como Dios se lucio cambiando una noche común en un evento extraordinario...

Lamentablemente la gente ha perdido el sentido de lo que es la vida...

Seguimos adelante, un enorme abrazo!

ticopander dijo...

gracias Man, por animarme y estar leyendo las entradas. y como tu dices, yo creo que esa es la magia de Dios, que toma lo vil y despreciable del mundo para avergonzar a los sabios.