martes, 24 de agosto de 2010

QUE PASA?

A donde vamos a parar? que le espera a una iglesia ya casi sin fuerza, que está muriendo? existirá alguien que quiera decir "HEME AQUI"? increíblemente parece que nos hemos quedado sin fuerza, sin gasolina, que ya no damos más. es triste ver como la iglesia se hace vieja y son pocos los jovenes determinados a jugar un papel sin precedentes en la historia de la iglesia.

Que pasa con los valientes, con la gente sin miedo a nada, con los hombres y mujeres que rompen compromisos con el mundo, solo por AMOR a Él. donde quedaron los que siguen a Cristo con un espíritu formidable de confianza y entrega total por la causa de Dios y por su justicia. O es acaso que ya la nueva generación se desentendió del compromiso que conlleva seguir a Cristo? o es que esta generación de Cristianos no está notando que nuestros líderes envejecen y que nadie quiere afrontar con valentía el reto de seguir al frente de la obra de Dios?

cuenta la historia que un día el gran Alejandro Magno envió por uno de los hombres de su ejercito para conversar con él, cuando el joven llegó donde el conquistador, este le preguntó, porque no has ido al frente de batalla, porque no has querido pelear? y el joven le respondió "mi señor tengo miedo, no quiero morir, me da pavor ir a la batalla". Alejandro Magno le respondió, ahora dime, cual es tu nombre? a lo que el joven respondió, me llamo Alejandro. En ese momento el emperador se puso furioso y le encrimina "Te llamas Alejandro!, ENTONCES COMPORTATE COMO UN ALEJANDRO, VE AL FRENTE DE BATALLA Y PELEA".

Nos llamamos cristianos pero muchas veces no queremos portarnos como tal, nos resulta sencillo ser cristianos en la iglesia pero afuera nadie nos conoce, que pasa con la gente que no está comportandose como debería? a donde está la fuerza para seguir?.
quiero hacer un paréntesis en este momento para decir que no puedo generalizar, que si hay unos pocos que quieren y que se han empeñado en servir con amor y en brillar en medio de las tinieblas del mundo, y que buscan día con día ganar la batalla. sin embargo en esto hay mucha tela que cortar, no hemos querido empezar a pelear, vivimos de prestado pero sentimos que la vida es toda nuestra, grave error, por eso vivimos con miedo.

La sangre cayendo de nuestra boca rota, el sudor revuelto con tierra y de cara al suelo, cansancio, tal vez desanimo, dolor por momentos, pero nunca nos rendiremos, golpeados y maltratados por el mundo, pero nunca nos rendiremos, somos de una raza casi extinta, de una gente que ya no se ve, tal vez alguien alguna vez te contó sobre los héroes, esa gente maravillosa que nunca se rinde, que lo entrega todo por una causa y que inclusive da su vida por lo que cree, pues somos nosotros, los pocos que quedamos pero con la fe puesta en Cristo entendiendo que aunque alguno caiga, otro se unirá a la causa, recordando que nuestra causa es la más justa, y que nuestra fuerza proviene de un poder más allá de nuestro entendimiento... pero ya somos pocos y necesitamos más valientes, más héroes que no dejen morir nuestra empresa. que pasa con la gente que escucha el llamdo, que oye la trompeta, que sabe dentro de su corazón que tiene que unirse a la batalla? que pasa con aquellos refuerzos que no llegan? VAMOS GANANDO, no podemos perder, nuestra fuerza proviene de DIOS.

La guerra es fuerte pero Nadie puede vencernos somos màs que vencedores en Cristo.

Dios bendiga a los hijos de pastores de Costa rica y el mundo.

sábado, 7 de agosto de 2010

MIRANDO AL INVISIBLE


Regreso de nueva cuenta a escribir un poco sobre mi viaje a Cuba y como Dios con esta experiencia transformó mi vida para mejor, nada hay que Dios no sepa, y estoy realmente convencido que en sus planes estaba este viaje para mi, para que entendiera muchas cosas y me diera cuenta de muchas otras.

Primeramente quiero dejar en claro algo, para todos aquellos a quienes les es más fácil criticar y murmurar, para todos los que viven buscando a quien echar al suelo, para esos que la única forma de sentirse bien es haciendo quedar mal a los demás, para los que sin conocer el trasfondo simplemente critican, para los que no ayudan pero son los primeros en hablar, también a aquellos quienes no creen o no creyeron en el equipo de Hps que iba de Costa Rica a Cuba este año, inclusive para muchos hijos de pastores que en vez de apoyar y estar felices porque una delegación de ellos mismos fue a llevar buenas nuevas a la Isla han abierto su boca solo para hablar mal, para toda esa gente, DE VERDAD MIS MAYORES BENDICIONES, se les ama, yo les aprecio, los amo de verdad con todo mi corazon, deseo de Dios las mayores bendiciones para su vida, su familia y su ministerio, y quieron que sepan que a pesar de las circunstancias pueden contar conmigo, porque yo se que hay en mi corazón, se quien soy y el anhelo y el amor con que fuimos a servir todos los ticos Hp, arriba muchachos, Dios estuvo con nosotros, y nos mantenemos como mirando al invisible, tenemos puestos los ojos en Jesus autor y consumador de la fe.

hablando de fe, eso es lo que sobra en el pueblo cubano, nunca he conocido a gente con más fe y fervor espiritual que ellos, cada conversación era una lección de vida, cada segundo a su lado era enamorarse de su mundo, todo lo hacen con esperanza, con alegría como si en verdad estuvieran viendo fisicamente a Jesús, como si pudieran palparlo, esa es la sensación que se percibe al escucharlos hablar o al verlos actuar, es una generación valiente, sin miedo a nada, respetuosa de sus autoridades, de sus gobernantes, y con un gran TEMOR POR DIOS, y eso como lo hemos perdido los costarricenses.

Cuba es una experiencia maravillosa, es una tierra distinta en mil sentidos a mi país, pero que bendición mas grande fue haber visitado esa maravillosa isla, su gente es encantadora y aunque nuestro deseo era ir a bendecir a esta nación, fuimos nosotros los que salimos bendecidos, fuimos nosotros los que aprendimos de ellos, aun en medio de las ministraciones, de los momentos en que teníamos que orar por ellos, eramos nosotros los que recibíamos la doble porción del espiritu, su vida es ejemplo para muchos, y todo aquel que pueda viajar a Cuba se enamorará de su gente, de su belleza de la gloria de Dios reflejada con claridad en sus vidas, y quien sabe hasta tal vez saldrá un poco avergonzado sabiendo que pudiendo dar más de si mismo, no lo ha hecho. tengo tanto que decir de este magnifico pueblo que se me hace un enredo mental y no digo nada, pero creanme cuando les digo que la gloria de Dios estuvo en esos tres días de campamento y ahora creo que si viene un avivamiento para Latinoamerica, empezará en Cuba.
Hace 16 o 17 años mi papá hizo un viaje misionero a Cuba y me contaba la situaciones y como a pesar de todo este pueblo tiene un increible fervor por Dios, un amor sobrenatural por la obra y son fascinantemente cálidos, dieciseis años despúes llego a la Isla y me topo con la misma descripción que hizo mi papá, le comento a un pastor sobre esto y su respuesta no se porque e hizo llorar, me dijo "varón, aqui estamos, confiando en Dios, como viendo al invicible, por eso seguimos adelante"

el campamento hablaba de la valentía de que tenemos que perseverar en ella, pero como se le habla de valentía a un héroe, como se le explica el valor a gente que aprendió a vivir sin miedo, a creer ciegamente en el Señor. Ustedes mis amigos cubanos son los verdaderos héroes de la fe de nuestros tiempos, ustedes son graduados en coraje y agallas, y mi ovación de pie para un pueblo que en verdad ha sabido confiar fielmente en Dios, un publo que camina como mirando al invisible, un pueblo que con su vida testifica de la misericordia y la gracia de Dios.

regresamos de Cuba pero nuestro corazón se quedó con ellos, ahora siento que una parte de mi queda vacía, que no estoy completo y se creó en mi una necesidad enorme de verlos de volver, de llevarlos en mis oraciones.

este es mi homenaje para un país que me abrío las puertas y se quedó con mi corazón, gracias por ser valientes mis hermanos, gracias por darme TANTO TANTO, gracias por no desistir y por decir aqui estamos:

Aquí estamos,
Los recuerdos se me agolpan en la mente,
Y en algún momento tu figura emerge,
No se como, pero siempre esta presente
En el tiempo y el lugar…

Aquí estamos,
Nuestro paso aun es firme a tu lado,
Nuestros ojos aun te miran, caminando,
Casi casi ya te tocan nuestras manos,
Llegaremos hasta ti…

Nuestra barca
Hizo agua tantas veces en la noche,
Y si no se hundió jamás, fue por tu mano,
No por nuestra habilidad, si no por tu compasión,
Aquí estamos,
Sabedores de que solo fue tu gracia,
Y conscientes de que siempre habrá mañana,
En tu nombre y por la fe
Aquí estamos